Dulce Compañía 🕊
La ancianita que estaba en el asilo no hablaba con nadie ni pedía nada. Parecía que solamente existía, meciéndose en su mecedora chirriadora. No recibía muchos visitantes, por lo que una enfermera joven iba a su cuarto a menudo durante sus recesos. Sin hacer preguntas a la mujer para tratar de hacerla hablar, simplemente agarraba otra mecedora y se sentaba junto a ella.
Después de varios meses, la anciana le dijo: 《Gracias por mecerte conmigo》. Estaba agradecida por la compañía.
Antes de irse al cielo, Jesús prometió enviar un compañero constante a sus discípulos. Les digo que no los dejaría solos, sino que enviaría su Espíritu Santo para que estuviera con ellos (Juan 14.17) Esa promesa sigue siendo cierta para los creyentes en Jesús hoy. Jesús dijo que el Dios triuno hace su "morada" en nosotros.
El Señor es nuestra compañía cercana y fiel durante toda nuestra vida. El cantante Scott Krippayne expresa esta verdad en una canción: 《En mi noche más oscura, Él es la estrella que me guía; y en mi maldad, es el corazón que perdona; un oído abierto para cada oración silente, un hombro para las cargas que no puedo llevar. Dulce compañía desde ahora y por toda la eternidad》.
Podemos disfrutar hoy de su dulce compañía.
De "Nuestro Pan Diario".
El corazón cristiano es el hogar del Espíritu Santo.
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